sábado, 28 de noviembre de 2015

El principal culpable

Participaciones en octavos de final de Copa Libertadores por país sudamericano (Fuente: Propia)

Dirigentes, técnicos, jugadores, etc. En la permanente búsqueda de culpables al karma de no poder escuchar nuestro himno en un mundial se deja de lado al principal responsable: el club de fútbol.

El cuadro que se observa al inicio de este post muestra el número de clubes que han jugado los octavos de final de Copa Libertadores por país sudamericano. A veces, el romanticismo del sí se puede se debe dejar de lado para un análisis diferente. Es necesario esconder la blanquirroja, ponerle la pausa a la canción criolla de turno y empezar a mirar números. Recordar que si no ves indicadores, no mides y si no mides, no mejoras.

Garcilaso es el único equipo peruano que llega a Cuartos de Final desde
Sporting Cristal en el 97 (Foto: cusconoticias.pe)

No es casualidad que los países con menos participaciones en octavos de final de Libertadores sean justamente aquellos que ocupan los 3 últimos lugares de las eliminatorias y los que muchos ya descartan en la pelea por un cupo para el mundial de Rusia.

La mayoría de clubes de fútbol tiene innumerables deudas con la Sunat y con sus propios jugadores. Lamentablemente, ningún club tiene el pago de estas deudas como prioridad. Desde hace varios años, el cortoplazismo ha sido el cáncer de los equipos de primera división, esto lleva a que se  siga despilfarrando dinero en jugadores que cuestan más de lo que valen con el único propósito de hacer un buen papel en el campeonato y tentar una clasificación a un torneo internacional. No hay inversión en menores. No hay pago de deudas. Y paradojicamente, no hay buenas participaciones tanto nacional como internacionalmente. 


Desde ese Cristal del 97 y obviando al Garcilaso del 2013, cada club de fútbol ha sido eliminado del mundial. Inexistentes afuera y sin producir jugadores que puedan competir en las ligas más importantes del mundo, se van conformando con los ingresos que les da la televisión y triunfos pequeños, festejados frente a asientos vacíos y sobre grass artificial.

La última gran campaña de un equipo peruano en Libertadores fue la de
Sporting Cristal en el 97 (Foto: historiascoperas.blogspot.com)
Hay soluciones que los dueños de los clubes prefieren evitar pues les tocaría empezar desde abajo y trabajar con un plan a largo plazo, especialmente con los menores. Aquí se competiría afuera, tocaría perder, salir triste y  goleado pero compitiendo. Intentemos medir. Revisemos año tras año como nos fue en los torneos internacionales en donde participaron niños y adolescentes con futuro en el fútbol. Veamos en qué estamos bien y qué toca mejorar. Pensemos a futuro sin permanecer estáticos mientras los países vecinos cosechan triunfos, de lo contrario tocará seguir comentando, analizando y escribiendo sobre esperanzas y derrotas.

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